Qué fin de semana largo raro. ¡Me la pasé haciendo cosas! Seguramente después postearé en detalle de cada una de ellas.
Primero que me agarró el ataque de orden y terminé tirando un montón de papeles viejos y cosas que no servían. Incluidos los apuntes de Comunicación, ya que nunca terminé la carrera ni tengo intenciones de hacerlo.
Después, tuve un ataque Utilísima cuando fuimos a visitar a mi suegra y me llevé un montón de proyectos sin terminar en una valijita de plástico so divine que compramos el viernes en Sodimac. Así que me puse a pintar unas figuras de yeso que debían estar guardadas desde 2005 y preparé un par de regalos para unos cumpleaños que se vienen en breve. Ah, también fabriqué un mosaico pixel art para usar de posafuentes.
El sábado también fuimos a una cena en la casa de una amiga de Papá Oso en la que, al contrario de lo que sucede siempre, tomé muchos vasos de vino y ninguna de Coca Light. Estuvo muy divertido pero terminé para atrás y me fui a dormir mientras mi marido y los amigos se iban a la fiesta Ambar La Fox.
Y e domingo ni salimos de casa. Hubo ataque de orden y cociné panchuques, un plato de alta gastronomía pompeyense que mi amigo Mussu trajo a la civilización cuando se vino a vivir a la Argentina. Así que para descansar me parece que voy a tener que esperar al 25 de mayo.
2 comentarios:
Lake, al panchuque, algunos en Tucumán también le dicen "pancho electronico" lo reto a encontrar mejor nombre para un snack.
Capitán Intriga los llama "Panchos Automáticos"...
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