Hoy vi el Ojo de Saurón
Esta mañana me dirigí a la parada del 151 como lo hago habitualmente. Mientras esperaba ansiosamente la llegada del bondi y luego de tropezarme varias veces con cordones y paredes que no se dignan a correrse al ver pasar tan grata figura, levanté la vista y vi venir una moto gigante, una especie de terminator 4. Cuando más cerca lo tenía, más seguro estuve que era el fin de mis días.
De lentes negros y campera de cuero y montando en una moto kilométrica, se dirigía hacia mi el mismisimo Daniel Hadad. Por un momento pensé que tras él, miles de orcotaxis vendrían para destruirme. Pero no, siguió de largo ignorando mi presencia.
Aun sigo con vida, aunque desde este día ya no seré el mismo.
He visto al mal directo a los ojos.



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