Confesiones de una Mente Peligrosa
Nunca voy a cansarme de criticar a Juan Castro por su política de "mostremos lo que sea que parezca periodístico pero que tenga impacto así no nos levantan nunca". Pero yo no soy muy diferente a él. Por eso apelaré a un golpe bajo para subir el rating de mi blog ahora mismo.
No sé por qué hoy me acordé de la navidad de cuando tenía 5 años. No recuerdo una navidad anterior a esa. Pero recuerdo esa navidad, en 1983 o algo así, en la casa que mi abuela alquilaba en Liniers. Recuerdo que me preguntaron que quería para navidad (por suerte en mi familia no hacían la payasada de Papá Noel, aunque sí la de los Reyes Magos) y me acuerdo claramente que había pensado en pedir que mi papá y mi mamá volvieran a estar juntos. Ellos se habían separado hace poco. Antes se habían separado y habían vuelto a estar juntos. Pero al final desistí porque en el fondo sabía que nadie me iba a conceder ese regalo...
Ya estan llorando sobre el teclado?. Bueno, me voy a llorar yo solo ahora. Feliz Navidad
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