La televisión que nos alimenta
El otro día tuve la desgracia de hacer ver el final de "Circo Criollo" y el principio de "Cámara en Mano".
Yo no tengo mucha fe en la televisión argentina. Más que nada porque no se apunta al talento sino al éxito fácil. No manda la calidad, manda el rating. Y el rating se mide en 800 hogares de capital y gran buenos aires. Pongamos que en cada hogar son 4 personas: 800x4 = 3200 personas censadas. Somos la décima ciudad más poblada del mundo, con 11 millones de habitantes. ¿De qué mierda me hablan? Sí, es cierto, el método estadístico debería hacer que eso funcione. Pero 3200 hogares en una ciudad de 11 millones no es suficiente (tampoco es suficiente que se mida sólo una ciudad cuando el país es lo suficientemente grande como para que haya diferencias significativas entre lo que mira un Rosarino, un Porteño y un Tucumano).
Anyway, me fui por las ramas. A lo que iba es que siempre me quedo con la esperanzadora idea de que nada puede ser más bajo que "El Show de Videomatch" (o "Showmatch", bah). Pero me equivoco tanto... "Circo Criollo" tiene pretensiones de late night show. Pero es un típico híbrido con el sello de Repetto: quiere ser inteligente, divertido y con glamour, pero sólo es chabacano y hasta un poco boludo. Esa competencia de cuantos segundos aguanta un tipo bajo una lluvia de melones... es bizarro, pero no se entiende bien qué quiere decir, si es un concurso como el de los huevos duros, si es una joda o qué. No se entiende. Y los chistes fáciles. Dios mío. O sea, mientras haya un doble sentido que diga lo que quiera, que sea zarpado o whatever. Pero cuando los chistes son tan directos ya no es zarpado, es ordinario y grosero. Y me cae muy mal.
Después caí en Telefé. "Cámara en Mano", ¡Qué programón querido!. Matías Martin cada vez está más parecido a Lex Luthor. El ciclo es "Cámara testigo" mezclado con cualquier programa que tenga noteros (y con el bonus de los efectos de sonido de CQC que lo único que indican es que el material no es lo suficientemente bueno como para salir al aire "pelado").
Pero lo peor es ese gordo, Cabito, que tienen de movilero que es lo más maleducado y grosero que vi en mi vida. Querido, tu presencia en la pantalla es una mancha muy oscura en la historia de la televisión argentina. Y mirá que hay un historial grande de manchas...

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