South Costanera
El domingo, después de palermitar un rato, nos fuimos a dormir la siesta a las 20. Y nos despertamos a las 9 del lunes. Pero ya había planes: ir a la costanera sur a sacar fotos de carritos. Así que pasamos a buscar a Big Beer Bob y Lucas para ir a la costanera. Ahí fuimos directo al "Chorimóvil" en busca de emociones fuertes ("mondiola", "chori" y hamburguesas).
Seguimos rumbo a la impredecible feria, en donde nos encontramos con J&J. Recorrimos los puestos, viendo chuchería tras chuchería, tocando perros mimosones y despertando pasiones entre los turistas LGBTT (sobre todo Papá Oso y Bob). En el interín, recibimos un mensaje de célebre blogger al que le gustan las matemáticas para muñecos. Le informamos dónde estábamos y nos dijo que venía en camino, con un perro y dos chongos (creemos que su destino final era la reserva ecológica). Pero al rato nos manda un mensaje diciendo "hace una hora que busco un lugar para estacionar, me voy a Palerm". Lo que nos decepcionó un poco pero nos enseñó algo: no invitar divas a paseos para la plebe.
Repuestos de este duro golpe, caminamos hacia el lado de Córdoba, fotografiando puestos y viendo maravillas como la Bellota depresiva, el Power Ranger cabezón y el Spiderman rotoso. Y en eso divisamos la clave de la felicidad: un puesto de títeres de dedo. Sí, esos que en Palermo cuestan seis pesos. Y en Belgrano 3. ¡Acá costaban un peso cada uno! De más está decir que me llevé cinco: dos osos (uno polar, uno común), un Spiderman, un Godzilla y un Duende vestido de rosa con cara de pedófilo. Los tengo en mi escritorio haciendo una orgía con Batman y un tigre.
La tarde siguió sobre ruedas. No por lo ameno de la jornada, sino porque Papá Oso y Lucas alquilaron sendas bicicletas, mientras Bob hizo gala de su habilidad con el skate. Yo, como buen hobbit, sólo se caminar y cavar. Por eso seguí a pie, sacando fotos antológicas de los carritos. Cuando bajó el sol volvimos. Y fui el hazmerreír del clan porque la fotosíntesis me había dejado muy cansado. Soy una rata de PC, el sol no me sienta bien.
El domingo, después de palermitar un rato, nos fuimos a dormir la siesta a las 20. Y nos despertamos a las 9 del lunes. Pero ya había planes: ir a la costanera sur a sacar fotos de carritos. Así que pasamos a buscar a Big Beer Bob y Lucas para ir a la costanera. Ahí fuimos directo al "Chorimóvil" en busca de emociones fuertes ("mondiola", "chori" y hamburguesas).
Seguimos rumbo a la impredecible feria, en donde nos encontramos con J&J. Recorrimos los puestos, viendo chuchería tras chuchería, tocando perros mimosones y despertando pasiones entre los turistas LGBTT (sobre todo Papá Oso y Bob). En el interín, recibimos un mensaje de célebre blogger al que le gustan las matemáticas para muñecos. Le informamos dónde estábamos y nos dijo que venía en camino, con un perro y dos chongos (creemos que su destino final era la reserva ecológica). Pero al rato nos manda un mensaje diciendo "hace una hora que busco un lugar para estacionar, me voy a Palerm". Lo que nos decepcionó un poco pero nos enseñó algo: no invitar divas a paseos para la plebe.
Repuestos de este duro golpe, caminamos hacia el lado de Córdoba, fotografiando puestos y viendo maravillas como la Bellota depresiva, el Power Ranger cabezón y el Spiderman rotoso. Y en eso divisamos la clave de la felicidad: un puesto de títeres de dedo. Sí, esos que en Palermo cuestan seis pesos. Y en Belgrano 3. ¡Acá costaban un peso cada uno! De más está decir que me llevé cinco: dos osos (uno polar, uno común), un Spiderman, un Godzilla y un Duende vestido de rosa con cara de pedófilo. Los tengo en mi escritorio haciendo una orgía con Batman y un tigre.
La tarde siguió sobre ruedas. No por lo ameno de la jornada, sino porque Papá Oso y Lucas alquilaron sendas bicicletas, mientras Bob hizo gala de su habilidad con el skate. Yo, como buen hobbit, sólo se caminar y cavar. Por eso seguí a pie, sacando fotos antológicas de los carritos. Cuando bajó el sol volvimos. Y fui el hazmerreír del clan porque la fotosíntesis me había dejado muy cansado. Soy una rata de PC, el sol no me sienta bien.
0 comentarios:
Publicar un comentario