Lake y su bizarre streaming

Un día del orto
Qué mal empecé el día. Primero me quedé dormido y cuando desperté no podía moverme. Por suerte Papá Oso me llevó en auto al trabajo. Después, la Internet de la oficina iba y venía y no podía terminar nada de lo que estaba haciendo. Después, me interrumpieron dos veces mientras escuchaba David Bowie (arderán en el infierno sacrílegas bestias!). Para ver si me reanimaba me comí un bon-o-bon asesino que me cayó para el orto. Después me cagué de calor en el subte (con dolor de cabeza incluido, gracias al bon-o-bon). Después se me ocurrió ir al Farmacity a comprar vitaminas y el pelotudo de seguridad no me dejó pasar con la mochila (casi lo mando a la mierda). ¿Alguien me explica para qué tienen seguridad, cámaras y espejos si son tan rompebolas con que dejes la mochila en el locker? Encima, había una cola enorme para pagar.
Por suerte, cuando llegué a casa Papá Oso me convenció de que me diera un baño. Llené la bañera y puse burbujas y al rato ya estaba hecho una persona normal de nuevo. Bah... "normal", entre comillas.