Arthur y los Minimoys
Con la proliferación de películas animadas por computadora, los sucesivos lanzamientos ya no me generan tanto entusiasmo. Pero la historia detrás de "Arthur y los Minimoys" me pareció interesante: el cineasta Luc Besson escribió una serie de cuentos infantiles que se convirtieron en un boom editorial y, de ahí, derechito a la pantalla.
Así que nos decidimos a darle una oportunidad. Y la verdad, la peli está muy bien. La trama del filme cuenta la historia de Arthur, un pendejito que vive con su abuela y que, para evitar que les rematen la casa, debe ir a buscar un tesoro escondido a la tierra de los Minimoys, unos duendecitos que viven en su jardín. Las partes con personas de carne y hueso son un poco bobas, casi parecen de una película yanqui y no de una francesa. Pero la parte animada, cuando Arthur entra en el mundo de los Minimoys, están muy bien. Sí, muchos me pueden decir que la peli tiene bastante de "Ant Bully" y que los personajes son muy parecidos a los de "El cristal encantado". Pero la verdad, a mí no me importó. Me pareció grandioso el diseño de arte. Es que ya estoy medio podrido de que monstruos simpáticos y animales parlanchines que se parecen mucho unos con otros. Y acá, la estética hereda el estilo de Jim Henson ("El cristal encantado", "Laberinto") y tiene un tratamiento de los escenarios "fotorealista" que me pareció muy grosso. Aunque, hay que decirlo, el final es un poco sonzo. En Francia la peli la rompió (aunque en EEUU la odiaron) y ya hay dos secuelas en camino. No se pierdan la escena de baile!
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