Confessions on the Dancefloor
Casi al mismo tiempo que Madonna editó "Confessions on the Dancefloor", Andy Bell editó su "Electric Blue". El disco me parece un poco berreta, pero es mucho mejor que cualquier disco de Erasure de los último 10 años (bueno, no era difícil superar el mamarracho de "Other People's Songs").
Y sí, Andy se confiesa: amores torturados, canciones alegremente despechadas, cantos a la alegria de vivir y esperanzas de amor eterno. Musicalmente es como si el cantante de Erasure hubiera vomitado la música bailable gay que consumió en los últimos 10 años, y algunas cosas que le quedaron atragantadas de los 80. Por momentos tiene arreglos similares al primer Depeche Mode, por otros algunos giros medio kitch bien Erasure (que en algún punto son como Abba pero hecho por dos locas electro). Y mucha melodía bien arriba inspirada en William Orbit y Daft Punk.
Mortal el tema "Love Oneself", una suerte de "I Feel Loved" a dúo con Claudia Brucken, con un estribillo muy Nacha Guevara:


"It's a pleasure to be here / And an honour to meet you / We only have one life / This is not a rehearsal / Blink and it's over / Life is a riot / We only have one life / This is not a rehearsal"


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