Punta del Este II

Me llevó otra semana más hacerme un poco de tiempo para postear la segunda parte del viaje a Punta, pero lo conseguí. ¡No puedo creer todo lo que hicimos en cuatro días!



Paseando por Punta
Fuimos a muchos lugares. Caminamos por Gorlero, fuimos a la playa (el hotel tiene su propio parador enfrente), visitamos el puerto y la feria de artesanos. Me volvió loco el tema del cambio, porque hay que dividir el precio de las cosas por seis para saber cuánto sale cada cosa en pesos argentinos. Los precios en Punta son un poco más caros que en Buenos Aires, pero tampoco para cortarse las venas. También comimos bastante.



Comer afuera
El primer día hicimos la obligatoria escala en La Pasiva de Gorlero. La Pasiva -sí chicas, se llama así- es una tradicional cadena de comidas rápidas especializada en frankurters (panchos) y chivitos (lomitos). Nosotros pedimos un canadiense, que viene con lomito, ensalada, papas fritas, ensalada rusa, panceta, morrón, aceitunas y mayonesa. Una delicia. No nos matamos comiendo, pero con refrescos y cuatro cafés gastamos 1045 uruguayos (174 pesos argentinos).



Otra de nuestras paradas fue Il Mondo della Pizza, una concurrida pizzería (también en Gorlero) en donde pedimos una mitad palmitos mitad muzza y albahaca (venía con una suculenta montaña de albahaca). No recuerdo cuánto gastamos, pero fue alrededor de 25 pesos por cabeza.




También estuvimos en Tratoría da Antonio, la cantina de un simpático italiano muy bien atendida por uruguayos, en donde probamos spaghetti con frutos de mar. Muy frescos los maricos y muy recomendable el precio (gastamos algo así como 40 pesos argentinos por cabeza).

Pero creo que lo mejor fue comer la última noche en el puerto, en el restaurant La Marea. Por 335 pesos uruguayos (unos 60 pesos argentinos) ofrecían un menú de entrada, plato principal y postre. De entrada pedimos rabas y mejillones. De plato principal pedimos pescado del día (lenguado) a la plancha con guarnición de puré de calabaza y chop suey (en rigor de verdad eran unos vegetales salteados, pero se ve que allá los llaman así), inmejorable elección ya que el pescado era super fresco y gustoso. Y de postre espuma de limón.




Punta Ballena
Creo que fue el segundo día que fuimos a Punta Ballena. La verdad, la geografía que tienen los uruguayos es muy impresionante y Punta Ballena es un buen ejemplo: una punta de tierra que se adentra unos 500 metros en el mar y que termina en una impresionante saliente de piedras. Bellísimo. Pasamos también por Casapueblo, que estaba lleno de gente que quería visitar el museo de Páez Vilaró.
Después partimos raudamente a Cumbre de la Ballena, un hotel boutique ubicado a algunos kilómetros en la cumbre de la montaña. Vimos la puesta de sol en ese lugar, con una vista privilegiada de Punta del Este, el Océano Atlántico y la Laguna del Sauce. Todo muy top (precios en dólares, obvio). Tomamos allí el té (parece que hay que reservar para ir pero a nosotros nos atendieron igual). Tomamos un té en hebras con tortas, sandwichs de miga, tostadas con mermelada y dulce de leche y palitos de queso. Esa merienda fue la gloria. Un lugar super recomendado para visitar.







¡Falta un poco más! En la semana mando la última parte



4 comentarios:

Fausto ! dijo...

Qué rico todo!!! Y me encantó "la pasiva"... "Me voy a comer el lomito de la pasiva".
Che y... cómo tostadas con dulce de leche? Que nos lo devuelvan! jaja

wildmambo_pablorivas dijo...

el loguito de la pasiva es todo!!! un nene dandole un beso a una salchicha!
:) si me acuerdo lo escaneo y te lo mando!

le amo

Anónimo dijo...

y dos hermanas?
no me olvides?
popeye?

eso no existe fuera de temporada?

Lake dijo...

es que fuimos 4 días nomás, no pudimos hacer más cosas...